Restauri

La operación de restauración a interesado todos los ambientes interiores y los prospectos exteriores construidos en travertino, ladrillos  y enlucido, y un nuevo uso de los colores del siglo XVIII.

La operación de restauración a interesado todos los ambientes interiores y los prospectos exteriores construidos en travertino, ladrillos  y enlucido, y un nuevo uso de los colores del siglo XVIII. Particular atención a sido dedicada a las intervenciones sobre los blasones monumentales y sobre el portal lignario, uno de los cuatro antiguos todavía presentes en las puertas urbanas- los restantes están colocados en las Porta San Paolo, Pia y del Popolo, ya resturado en 1976.
A pesar del origen arquitectónico-tipológico del edificio, una puerta de entrada a través de algunas murallas con valor defensivo de operaciones destinadas a mejorar los espacios interiores, obviamente de pequeñas dimensiones, a través de unas intervenciones destinadas a simplificar los itineraros interiores y a mejorar el uso también por parte los discapacitados, sín alterar las características constructivas e históricas que lo caracterizan.
El monumento ha sido puesto recientemente (Jubileo del año 2000) a una restauración total de todas las superficies, y en consideración de su discreto estado conservativo, ha necesitado de una intervención de mantenimento sea de los prospectos exteriores que de los frente a la galería interior.
Las intervenciones más significativas conciernen la planta baja: con el ampliación de la planta  de los “sanpietrini” antes referido al solo portal de acceso, que vuelve a proponer intervenciones similares ya realizadas en Roma (ver recién intervención en Porta Pia). El área interesada por el ampliación llega a ser pavimentada con los cubitos de adoquín (sanpietrini) delimitada por unas columnas en piedra y unas cadenas para cerrar el pasaje. En esta manera el área perteneciente al museo obtiene más amplitud y se transforma en un lugar de estacionamento para los visitantes.
Para preservar el espacio obtenido, han sido instalados sobre los dos lados de la puerta una verja de seis antas, abiertas de día, en el interior del perfil del edificio, para permitir la entrada a los visitantes y a los turistas, y cerrada de noche.
En el interior de la puerta monumental, en proximidad de la que se ha transformado en la entrada del museo, ha sido realizado un tramo que permite el acceso también para los discapacitados.
Las cinco puertas monumentales de madera están abiertas y permiten gracias a unas anchas vidrieras la visita de los espacios interiores adecuadamente preparados: se han preparado tres puertas vidrieras con posibilidad de apertura en los dos lados, exterior e interior, y dos vidrieras cerradas en proximidad de los cuerpos de la escalera para permitir también el pasaje de la luz durante el día. Las intervenciones estructurales concernen la inserción de dos tramos para los discapacitados en los desvanes del segundo piso y el ampliación de un pasaje frente a la fachada en el tercer  piso.